Los batidos de frutas son un desayuno o merienda delicioso y muy nutritivo que admite mil y una variantes. Por si esto fuera poco, además son alternativas perfectas a las bebidas calientes que apetecen mucho menos en las estaciones cálidas. Esto no quiere decir que en verano tengamos que renunciar a nuestras infusiones favoritas, podemos consumirlas en frío o lanzarnos a experimentar y utilizarlas como ingrediente en estos batidos.

En esta ocasión me he decantado por utilizar como ingrediente e inspiración el rooibos verde de arándanos, una infusión deliciosa y que añadirá a las propiedades antioxidantes de los arándanos y las frambuesas los beneficios del rooibos.

Yo utilicé fruta fresca, pero si el calor aprieta podéis utilizar fruta congelada, sabrá igual de bueno y el batido os saldrá más fresquito. También os recomiendo tener preparada la infusión con antelación, ya sea de la manera tradicional o en frío. Es más, si tenéis una licuadora potente que tenga la opción de picar hielo, incluso podéis tener congelado el rooibos en forma de cubitos y conseguir así un batido helado con textura cercana a la de un granizado.

Animaos a probar, es una receta muy fácil y rápida que podéis tener lista en pocos minutos.

Ingredientes:

• 1 taza de infusión de rooibos verde
• 1 taza de arándanos
• 1/2 taza de frambuesas
• 1/4 taza de almendras crudas peladas
• 1/2 taza de yogur griego
• un chorrito de zumo de limón
• 1 cucharada de miel (opcional)

Con estas cantidades salen dos vasos de batido medianos, 3 pequeños o uno extragrande.

Preparación:

Lavar y escurrir las frutas si son frescas.

Poner todos los ingredientes en el vaso de la batidora o licuadora y batir bien.

Añadir más cantidad de rooibos si os gusta menos denso.

Servir en un vaso, ¡y a disfrutar de un batido delicioso!

Esta receta es una colaboración de Carabiru, autora del blog Birulicioso.